El día 28 de Agosto del 2012,
memoria del Beato Jordán de Pisa, la fraternidad laical de Santo Domingo,
Milicia de Jesucristo de Cd. Juárez Chihuahua, tuvo a bien aceptar entre sus filas
a cuatro nuevos integrantes, iniciando su tiempo de prueba y recibir su primer
promesa de 2 miembros dentro de la celebración eucarística.
Iniciando el día, siendo tercer domingo
del mes de agosto, reunidos en asamblea, los postulantes pudieron expresar a la
fraternidad los motivos que les llevaron a solicitar su ingreso a la misma y
así formar parte de nuestra familia Dominicana.
Terminada la asamblea, se dio inicio a la
preparación para la celebración eucarística, ya dentro del templo parroquial se
procedió al rezo de las laudes, terminando como es tradición en la orden, con
el canto del Salve y Luz de la Iglesia, procediendo así a iniciar la
celebración eucarística siendo la una de la tarde.
Al inicio de la celebración, los postulantes
como los novicios entraron junto con el sacerdote en procesión, presidida esta
con la cruz alta y los ciriales, después de una hermosa liturgia de la palabra,
los postulantes fueron llamados, y con fe y amor manifestaron ante la comunidad
y ante nuestro presidente la intención de formar parte de la familia
Dominicana, enseguida fueron llamados los novicios quienes al escuchar “¿Qué
piden?” contestaron sin dudar, con voz fuerte “La misericordia de Dios y la
vuestra”.
Al terminar la homilía, el presidente de
la fraternidad el Sr. Gerardo L. Chavarría O.P. les impuso el escapulario a
Ameyalli Cecilia, Rosa Elva, Diego Eduardo y Juan Abdiel, dándoles la bienvenida a su periodo de
prueba, luego recibió en sus manos la promesa de Cinthia Judith y Miguel Basurto, de vivir según la regla de los Seglares de Santo Domingo
por un año.
Terminamos la celebración con el himno a
nuestro Padre Santo Domingo de Guzmán, pasando después al Salón Santo Domingo a
convivir con algunos miembros de nuestra comunidad parroquial, donde se dio
lectura de la carta de felicitación de Sr. Lázaro Humberto Gómez O.P.,
Presidente Nacional de las Fraternidades Laicales de Santo Domingo.
Nos encomendamos a la intercesión de
nuestra madre María Virgen del Rosario y a nuestro padre Santo Domingo, para
que nuestra fraternidad crezca cada día más en virtudes y numero.
